jueves, 6 de marzo de 2014

LOS MEJORES CHOCLOS

LOS MEJORES CHOCLOS

Cuando somos niños, somos auténticos, caminamos de la mano con la verdad,  simplemente decimos y hacemos las cosas conforme las apreciamos y sentimos, el tiempo, la vida y las personas mayores sin embargo,  nos van aleccionando, a ser más desconfiados, cautos, menos cándidos e ingenuos, inclusive muchas  veces apelamos a las “mentiras piadosas” como recurso para salvar alguna situación difícil o circunstancia  adversa….
Esta pequeña historia transcurrió durante la infancia vivida allá por los años sesenta, en nuestro querido barrio de Grau y Castilla en el valle de Lurín…. MI madre, una pequeña comerciante había abierto una bodega, acondicionando un local dentro de la misma casa familiar, es decir en la parte delantera de nuestra vivienda, hasta donde se dirigían los vecinos del lugar, algunos turistas y gente que se encontraba de paso hacia las playas del sur, además acudían regularmente los “paisanos”, que trabajaban en las haciendas aledañas y compraban sus productos los fines de semana….
La gran mayoría de peones y trabajadores, eran personas que recién llegaban desde el interior del país, venían desde provincias en camiones, muchos de ellos no hablaban correctamente el castellano solo el quechua y se hacía dificultoso entenderlos, mi madre que también era provinciana, apelaba a todos sus recursos para entenderlos con mucha paciencia y cariño, lo cual era muy apreciado por sus ocasionales compradores y clientes.
Los hijos de estas personas, niños inquietos pronto se insertaron con la muchachada del barrio. Compartiendo nuestros juegos, diversiones, pasatiempos y sobre todo el futbol deporte bendito que une a todas las personas, que no conoce de distingos raciales, niveles económicos, sociales, solo establece parámetros basados en la destreza y habilidad en el campo de juego….  y de esta manera casi sin darnos cuenta pasaron a formar parte de aquel distinguido contingente, que desde entonces y para siempre conformarían esa especial legión de amigos que albergamos en nuestra memoria y corazón.
En el barrio habían jugadores destacados, regulares y algunos flojos para mover la pelotita, ya nos conocíamos, de tal manera que cuando nos reuníamos para jugar una pichanguita en “El Arroyito” todos siempre pretendían escoger a los mejores para su equipo, por lo que teníamos que acoger a algunos “maletas” que en los otros equipos “No le daban bola” para que pudieran jugar y divertirse igual que los demás….Félix era el mejor de todos, rápido de movimientos e ideas ágiles, tenia potencia y pateaba con mucha fuerza con ambas piernas, de lejos era el mejor jugador del barrio y todos querían jugar en su equipo, a todo eso había que agregar su enorme picardía no solo para el fútbol si no para poner “chapas” e imitar la manera tan particular que tenían al hablar nuestros amigos provincianos….
En una tarde de aquellas y para que no se quedara sin jugar llamé a “Chili” uno de los amigos venidos de provincia quien se alegró cuando vio que era considerado dentro de nuestro equipo…En esa oportunidad no solo jugamos bien si no que ganamos el partido, después de una lucha intensa y denodado esfuerzo para finalmente lograr vencer al rival de turno, que era el equipo de Félix….
La apuesta era un “Marciano” (Chupete de hielo a base de frutas), así que cuando terminó el partido reclamamos nuestro jugoso premio y ya nos retirábamos de la cancha cuando se me acerca “Chili” y me dice: ¡Oye hermano te agradezco que me hayas considerado en el equipo! y mira, ¡ganamos! ¡Estoy muy contento y feliz!... sorprendido por esas palabras atiné a responderle: Cuando ganamos, ganamos todos y cuando perdemos igual perdemos todos….. Quiero pedirte un favor pero no te vayas a molestar insistió “Chili”, el sábado es mi santo y quiero que vayas a mi casa solamente te estoy invitando a ti. ¿Qué dices?, anímate, te espero….Moví la cabeza afirmativamente y me fui pensando, cavilando….
“Existe entre los seres humanos, sobre todo en los niños, la pureza,  aquel fluido natural que brota desde nuestro interior y que surge espontáneamente. Ahora entiendo que las cosas más impresionantes, los momentos más bellos, los hechos  más grandiosos, me han sucedido sin planearlos, sin ser premeditados. La capacidad de sorprenderme sigue intacta en mí desde que era un niño… Cuando eres espontáneo no necesitas dar explicaciones, todo funciona por sí mismo, eres auténtico, tal cual, como realmente eres”….
En casa me estaban esperando para la cena, había pescado fresquecito que era mi plato favorito, dimos rienda suelta a nuestro apetito fuertemente reforzado por el intenso trajinar en los partidos de la semana…. En plena cena le comento a mi madre:
-Madre, un amigo me ha invitado a su santo, es el sábado y quiere que asista de todas maneras.
-Ella asintió con la cabeza y me dijo alistaré un regalito para que le lleves…
La hacienda San Pedro, era una de las más extensas del valle y contaba con la presencia de un gran número de trabajadores provincianos. Los administradores y capataces habían dispuesto de unos terrenos que estaban al filo del canal de regadío para que aquellas familias edificaran sus viviendas de “quincha” (barro y caña), de manera rústica y sencilla en extremo.
Cuando llegó el día sábado mi madre preparó mi mejor teñida, mis zapatos bien lustrados y el regalo para el cumpleañero, me dirigí al lugar y cuando llamé pasando la voz, apareció mi amigo con esos ojos llenos de alegría que parecía que se le querían salir de su órbita, con una mirada plena, cargada de sinceridad y cariño que hasta ahora no puedo olvidar……
-¡Hola amigo!, ¡Qué bueno que viniste!, pensé que te habías desanimado, pasa, pasa y me hizo ingresar….Me quede impresionado y sorprendido de lo que encontré, esperaba ver una casa como la nuestra y de los vecinos, pero allí todo era diferente el piso era de tierra las paredes de quincha, no habían muebles, ni sillas ni asientos, solo unos bancos de madera, sin embargo todo lo que tenían, que era poco,  estaba limpio y ordenado, dispuestos en una habitación larga con una mesa, sobre la cual estaban unas vasijas de chicha y unas ollas, al fondo se podía apreciar la humeante cocina,  rústica, sobre unos adobes y leña…..
-¡Mamá! ¡Mamá!, ha llegado mi amigo dijo y casi corriendo ingresó a la cocina, desde donde hizo un  ademan llamándome con la mano, me acerqué y le alcance a escuchar, señalando las ollas. Esta frase cariñosa:
- ¡Sírvele a mi amigo, los mejores choclos son para él!, ¡por favor apúrate!, la señora vestida con su clásica pollera, sonriendo le contestó en quechua…….
Después de comer los choclos y un queso realmente exquisito, hablamos de fútbol, de los amigos, del barrio, de sus hermanos, con suma alegría y entusiasmo no paraba de hablar yo aun sorprendido solo atinaba a escuchar con atención….
-¡Sírvete esta chicha que está muy rica!, si quieres otro choclo, me avisas.
Ese día de vuelta a casa agradecí a Dios, por mis padres, mis hermanas por todo lo que se me había concedido, por aquellos choclos que quizás fueron los más deliciosos que pude comer en mi vida, me sentí halagado, querido, estimado, una personita que a sus escasos años me había ofrecido lo mejor que tenía, con una humildad y sencillez que aun ahora con el paso de los años no dejo de valorar……
Al cabo de mucho tiempo nos volvimos a encontrar el piloteaba un carro moderno, bajó del volante para saludarme y volví a encontrarme con aquella limpia y tierna mirada, que el tiempo y la vida no habían podido desgastar….Nos saludamos con un fuerte abrazo. Conversamos un rato, recordando los amigos de la infancia y el barrio que nos vio crecer, luego nos despedimos…..


miércoles, 5 de marzo de 2014

Una vez,,,Una lechuza…
El sol se terminaba de acostar más allá del mar en la distancia y caía la noche serena, casi de repente sobre el valle. repicaron las campanas, para la misa de siete, se hacía tarde y había que apurarse. Un humilde agricultor se preparaba para ir a regar sus sembríos Este año había escaseado el agua y no se podía dar el lujo de perder el turno que justo en esta ocasión  nocturno. Se disponía a abandonar la casa familiar cuando se percató que su hijo, un infante apenas de seis años de edad lo había estado observando con mezcla de ternura e inquietud en la mirada....
-¡Papá, te acompaño, solo esta vez, por favor dijo en tono casi suplicante.
-Es de noche, te puedes tropezar y caer a la acequia, mejor en otra ocasión cuando toque el turno de día.
-¡Solo esta vez, por favor papá, llévame contigo! Insistió el pequeño.
-Bueno, está bien solo si prometes portarte bien.
-Unos panecillos, plátanos, manzanas y una botella de emoliente en una bolsa de tela, lampa recta, camisa y pantalón de drill oscuro desgastado y descolorido por el uso, propio de tantas tardes bajo el sol del valle, vestimenta  propia para esa faena de campo,  las alpargatas un poco desflecadas y gorro con orejeras.
Abrigó al muchacho con su chompa de lana de alpaca , su gorro también de lana con chalina y zapatilla de lona y ya estaban listos para salir…
En la puerta un candelabro iluminaba ahora con mayor intensidad aquella viva representación de inmensa ternura, con los sencillos colores del Amor entre padre e hijo…
Había luna llena y se fueron por el camino, conversando tomados de la mano.,  eran profundamente felices, con sus propias ilusiones, el con el sueño de tener una buena siembra y mejor cosecha….aquel con la suerte que significaba estar al lado de aquella persona inigualable y solos sin que nadie pueda interrumpir la entrega de esa devoción y cariño que ambos sentían desde el fondo del alma y que en casa no se podía expresar abiertamente, un poco por pudor y otra por no desalentar a la madre, a quien también la querían, pero de otra manera.
-Papá como se llama ese árbol tan grande y que tiene sus frutos y aquel otro que está por allá.
-Ese es un palto hijo y el otro es un olivo que nos provee de las aceitunas.....
Llegaron hasta el potrero, el viejo sentó al muchacho encima del adobón que hacía de cerco dela chacra y le dijo: No te muevas de aquí, espérame que no demoro, voy a abrir la bocatoma para que ingrese el agua y vuelvo enseguida. Y se marchó rápidamente,
-Aprovechó el hijo para inspeccionar sigilosamente el ambiente nocturno que le rodeaba, pasaron los minutos que cada ez se hacían extremadamente largos….hasta que para recobrar la serenidad se puso a cantar, las canciones que le había enseñado la madre, melodías que después se transformaron en ruegos y rezos:
- Señor te prometo portarme bien le voy a hacer caso a mamá, no le quitaré los juguetes a mis hermanos…pero por favor que no le pase nada a papá ¡Y que vuelva pronto! ¡ Por Favor Señor!...
Luego de prolongado silencio un ruido extraño en un árbol cercano estremeció al infante y le pareció como si la electricidad hubiera invadido todo su cuerpo de pies a cabeza….se sintió morir…No se movió desde ese momento ni un paso atrás ni adelante…fueron minutos interminables…
De repente de tanto estirar el cuello logró divisar entre las sombras de los árboles al filo del camino la silueta delgada de una persona que cada vez se acercaba más hacia el…..¡Que alegría!.... sí!, era su padre!!!..
-Hola hijo, perdóname me demoré un poco ya que tenía que limpiar la toma, pero ya estoy aquí…..¡Pero que pasa hijo estás pálido y temblando!...
- No Papá es que acabo de ver al diablo!...
-Como es eso, explícame por favor…
-Yo estaba sentado aquí donde me dejaste y sentí un ruido fuerte en ese árbol y aparecieron unos ojos enormes y empezó a voltear su cabeza alrededor de su cuello y después hizo temblar el árbol y desapareció.
El viejo sonrió y le dijo: No hijo lo que has visto es una lechuza, un ave nocturna que se alimenta de insectos y lagartijas.
No te preocupes mientras va entrando el agua vamos a sacar la merienda….Y así lo hicieron.
Lo acercó a su pecho. Lo abrazó y le dio un beso en la frente….-Hijo nunca te sientas solo, cuando presientas el peligro recuerda que el Señor y tu padre aun cuando no los puedas ver, siempre estaremos contigo….
Acuérdate de esta oración y en esas circunstancias difíciles hazlo con fe y estarás a salvo: “Así como Jesús salió de Belén con José y María, yo también quiero salir con la misma compañía, tu por delante, yo tras de ti….”. Se abrazaron intensamente y en la inmensidad de la noche, mientras el agua ingresaba a la chacra, el valle pareció inundarse de ternura y cariño……
-Voy a mirar creo que el agua se está desbordando  por el frente…
-Aquel momento divino, íntimo y circunstancial ambos no lo olvidarían hasta el final de su existencia….¡Padre, Hijo y Espíritu Santo!…La noche, entonces se mantuvo en calma y quedó el sembrío regado con aquella profunda  manifestación de amor, fe y esperanza....

LA SALSA EN LA ESCUELA

LA SALSA EN LA ESCUELA
Teníamos recién casi dos semanas de internados en el Centro de Especialización de la Fuerza Aérea del Perú y ya se dejaba sentir el cambio drástico de la vida civil con la vida militar, todo tenía su tiempo exacto, no habían espacios vacíos, marcados por una rutina estricta y bajo régimen disciplinario, así que tuvimos que adaptarnos tan rápido como nos era posible….
Sin embargo no se podía perder el espíritu alegre y jovial de jóvenes adolescentes que en su mayoría no llegaba a los 20 años de edad y que estaban con las alforjas repletas de sueños e ilusiones, cada uno con sus diferentes inquietudes traídas desde la casa y de los diferentes barrios de la ciudad capital y en algunos casos desde ciudades del interior del país.
Habíamos retornado del comedor y teníamos media hora para asearnos y luego salir a formación para las clases programadas en la tarde, en la Escuela de Aerotécnica y de Electrónica, respectivamente….Siempre era el momento oportuno para las tertulias en la cuadra, hasta donde lo permitía el escaso tiempo que marcaba la pesada rutina.... Fue entonces que ingresó Arturito, "Con ese tumbao que tienen los guapos al caminar..." con su radio al oído y a todo volumen que dejaba escuchar una salsa de Hector Lavoe y dijo: - - -“Quiero saber quien en esta cuadra sabe bailar salsa…” y sale Pepesan y le increpa: Y tu de donde saliste para empezar no eres de este dormitorio así que circula no mas…..
-          - O sea que te chupas moreno, yo que creía que tenias mas clase!...
Alguien gritó desde la puerta de la cuadra: ¡No está el monitor, así que en el ruedo pican los gallos!…
Se pusieron dos camarotes en la puerta como tranca para que nadie pudiera ingresar y se juntaron más o menos seis radios portátiles y los camarotes y roperos cercanos  fueron colocados a la pared y de esta manera quedo conformado la improvisada pista de baile para la disputa….
Pepesan fue el primero que se lanzó al ruedo diciendo: Yo soy de Barranco, barrio donde se baila salsa de la buena y desde la cuna…
Saltó de su camarote el “Chito” Arana diciendo: Yo soy del rico “Llauca” y me devoro a este zambito con tenedor y cuchara, mientras se contorneaba al ritmo de la música, de esta manera ya estaba conformada la primera pareja.
No se quiso quedar atrás Roberto Mora y se lanzó al ruedo diciendo: Yo soy del rico “Suyorqui”…allí si que se baila la salsa dura y de la brava, por si acaso y para los sapos, soy del barrio de Villa Victoria y se bajó del camarote cantando..”Marca el paso que se te rompe el vestido…”
Entró a tallar “El Cabezón” Iraola diciendo yo si soy del legítimo Surquillo y no de barriadas así que te voy a enseñar cómo se baila la salsa….
Empezó el ritmo con arengas de los demás compañeros quienes con su palmas y silbidos daban aliento a los compañeros que se encontraban en la reñida competencia, hasta que terminó el primer round …..Ya no se muevan que viene la segunda canción y sintonizaron los pequeños radios portátiles en la misma estación, con otra canción de don Héctor Lavoe…..
Cuando mejor y más animosa se encontraba la reunión sentimos que empujaban la puerta y como por algún poder mágico provocado por el susto, no pasaron ni treinta segundos para que la cuadra quedara con todos sus enseres en perfecto orden,  parecía que simplemente no había pasado nada….
-Abrió la puerta Odón que estaba más cerca desde su posición en el dormitorio y entró el famoso y temido don Reynaldo mas conocido cono “El Cuervo”, Técnico Instructor Militar que estaba de Servicio de disciplina y que siempre a esa hora pasaba revista por todas las cuadras de nuestra Compañía.
-Así que ahora los “perros” hacen fiesta después del almuerzo y con puerta cerrada todavía… con una varita de madera en la mano revisó minuciosamente cada rincón, momento que aprovechó Arturito para emprender la fuga, siendo de otro dormitorio, ese asunto no era con él.
-Bueno muchachitos ustedes han estado haciendo bulla, esto parecía un vergel, ya saben que esto no es un parque de diversiones si no una Escuela de Formación Militar, así que en la noche van a salir a correr después del parte de ocho, yo estoy de Servicio de Disciplina,  vamos a ver quien se cansa si ustedes corriendo o yo contando cuantas vueltas van a dar a la explanada, dijo “El Cuervo” y se marchó dando golpes con la vara a los que encontraba al momento de salir……
Llegó la hora del parte nocturno y se cumplió la promesa ofrecida cuando pensábamos que se había olvidado y nos íbamos a dormir… Todos se van y se queda los angelitos del dormitorio 9, esos que les gusta cantar y bailar, ahora van a cantar conmigo….
Empezó la masacre y cuando íbamos por la vuelta quince y ya se dejaban sentir los estragos en nuestro físico empezaron los descontentos y reclamos airados. Nosotros estamos corriendo por culpa del famoso Arturito y el está bien cómodo durmiendo, eso no es justo…
Oye Pepesan tu eres el que inició todo, es por tu culpa que nos están maltratando.
-Corre nomas, hazte hombrecito, si no te gusta pide tu baja….
Hasta que se escuchó la voz del “chito” Arana quien se encontraba casi al final del grupo, adelantándose dijo: Ya muchachos no renieguen, si la pasamos bien y la gozamos ahora también, debemos estar juntos en las buenas y en las malas…. Además la noche es joven y podemos seguir cantando total al “Cuervo” le gusta que canten y empezó: “Entren que caben cien, cincuenta parados y cincuenta de pie”… y la gente le siguió con el coro de aquella melodía en salsa, del gran Héctor Lavoe…. “El Cuervo” que nos seguía con mirada vigilante nos dijo de manera “Cachacienta” así que están contentos entonces sigan corriendo, angelitos….Y seguimos corriendo hasta la media noche, que era el relevo de nuestro recordado Técnico. Ahora ingresan a su dormitorio sin hacer ruido para no molestar a los que están durmiendo…Así lo hicimos esa noche sudorosos y sin bañarnos, renegando nos metimos al sobre….
Cada vez que escucho esta canción, en alguna reunión vienen a mi memoria estos momentos inolvidables con la muchachada de la Di Tolla, de la Cuadra Nueve…..
Son estas pequeñas anécdotas ocurridas durante esos años en la Escuela, las que moldearon nuestro carácter y desarrollaron nuestro espíritu de solidaridad y de hermandad, aprendimos a valorar el hecho de convivir con las mismas alegrías y sufrimientos, comer los alimentos de la misma olla, lavar en turno  nuestras “gamelas” y que en la noche un compañero velara nuestros sueños..... Vivencias realmente irrepetibles y que perduran en el tiempo…desde aquel, ahora lejano 08 de febrero de 1974 han pasado 40 años durante los cuales se han fortalecidos nuestros lazos espirituales y agradecemos a Dios por habernos otorgado la dicha y el inmenso placer de pertenecer a la Gran Familia de la Promoción EDUARDO DI TOLLA STORACCE.

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DON  MAGA

Siempre en cada pueblo existen personajes muy especiales ya sea por su aspecto físico, por su estatura, contextura, raza o algún rasgo que lo identifique, además de otros  que por su peculiar forma de expresarse consiguen ocupar un sitio especial en el recuerdo de la gente, mas aun si se trata de centros poblados de provincia o un valle tradicional como es el caso de nuestro querido Lurín.
Alguna vez, siendo aun pequeño escuché contar algunas historias de un personaje muy querido y carismático al que le decían “Don Maga”, a su aspecto desgarbado y despreocupado se le sumaba una ligera cojera que la “polio” le había dejado desde la niñez, de mediana estatura y de gran físico ya que el trabajo rudo que realizaba, de carga y descarga de los camiones con material para construcción le había permitido desarrollar. Tenía una típica forma de hablar, su voz gruesa de tono grave, semejaba el potente mugido de un toro de lidia, aquellos que se dan tres vueltas al ruedo antes de embestir al torero… lo cual unido a su parquedad y ruda  forma de expresar sus ideas lo hacían el favorito en reuniones y tertulias de barrio con la celebración de sus repentinas y sorprendentes respuestas, cargadas de picardía y sabiduría popular, de aquellas personas que se refieren a tal o cual circunstancia siempre de la manera en que lo han vivido, no de lo aprendido en libros y nos dejan la certeza  que muchas veces las mejores lecciones de la vida son aquellas que se aprenden viviéndolas; así, alguna de estas manifestaciones, quedaban grabadas en el recuerdo de la gente y eran utilizadas en determinadas ocasiones por el colectivo popular para expresar una idea o un caso en concreto.
La pesca artesanal ha sido desde tiempos inmemoriales hasta la década de los sesenta y setenta  una de las actividades más utilizadas para el sustento de la gente del pueblo, debido a su cercanía con las extensas playas que bañan las costas de nuestro valle en Lurín y también a la gran variedad de peces que existen en nuestro litoral. Para llevar a cabo sus actividades los pescadores utilizaban una serie de modalidades y técnicas siendo una de las más usuales la pesca en “Cala” con redes (“Chinchorro”) y que se realizaba con el ingreso al mar de dos embarcaciones (balsas) que se disponían sincronizadamente en una área determinada en el mar, previamente estudiada por el jefe de la misión o patrón de balsas, para enseguida tender las redes (chinchorro) que luego de un tiempo prudencial eran recogidas de tal forma que semejaba un embudo, arrastrando hasta la orilla una variedad de especies marinas, entre peces, crustáceos y otros, contando desde la orilla con la ayuda de los “jaladores”, quienes ayudaban a tirar de los cabos (sogas) para acelerar “la varada” y evitar que se escaparan las especies capturadas.
Cuando había luna llena era casi seguro que al día siguiente era soleado de mar abierta y se auguraba buena pesca y los caladores se preparaban para ir al mar en la búsqueda de recoger los recursos que este le brindaba. Habían días en que la mar estaba “movida” y no era recomendable salir, así que era común entre los pescadores pasar la voz según la jerga pueblerina, cuando la mar estaba “en seca” (Marea baja) o “en llena” (Marea alta), para preparar las balsas subirlas a los camiones e ir a la playa en un ritual muy particular, ya que al paso del camión que transportaba las balsas por las calles del pueblo, iban subiendo los pescadores y ayudantes que se encontraban en el trayecto, llamándolos por sus apodos o “chapas” que con agudo ingenio les colocaban en el momento,  causando la burla y risas de los que estaban a bordo….
Un día de aquellos en que la pesca estaba venida a menos y los amigos “caladores” se encontraban arreglando sus redes y reparando las balsas, pasaba por el lugar “Don Maga” con paso sigiloso y cadencioso, iba con la camisa abierta y sudoroso debido al sofocante calor del verano.
-Oye ahí viene “Maga” pásale la voz para que nos cuente la última…. La verdad que lo que pretendían era pasar el rato con nuestro personaje, tan pintoresco y casual…
- ¡”Don Maga! Acérquese un ratito por favor, queremos hacerle una pregunta….
- Si díganme que quieren saber, pero rapidito porque estoy apurado, tengo harta chamba y no la puedo dejar pasar, dijo con ese tono grave,  particular en el…
-Queremos saber ¿Cómo estará el tiempo para mañana?,  para ver si salimos o no… ¿usted que dice?.
-Tú me estás preguntando cojude…., como voy yo a saber, ni que fuera brujo…..
Y después continuó…Hablando del tiempo, esos de la fábrica (EXSA) que se creen los muy bacanes, a un cojud… de esos le pregunté: qué hora era y me dijo mirando su reloj, son las catorce y treinta…. A lo cual le dije: Tu estas bien coju…como van a ser las catorce si el reloj solo tiene hasta las doce no más……
-Jajajajajajajajajajajajajajajajajjajajajaj, la risa de los pescadores hizo que las mallas de las redes se rompieran por los saltos que daban, al escuchar a don Maga, impredecible, pícaro y sincero….Aun no terminaban de reírse cuando agregó: Y ustedes que tanto se ríen, se creen los muy vivos si también son unos tremendos huev….siempre les escucho decir que la mar está en llena, que la mar está en seca…. A mí me van a hacer cojud. Cuando mierd… el mar se va a secar con tanta agua que tiene….y Chauuuu me voy…..dijo y se marchó… La risa fue tremenda debido a la gracia que causó esta expresión. Los amigos pescadores se encargaron de contar la ocurrencia en los diferentes círculos sociales del pueblo,  sin sospechar siquiera que “Don Maga” había dejado una frase para la posteridad en nuestro valle.
En las reuniones sociales, en los matrimonios, bautizos, quinceañeros, aniversario de bodas y misas de año, es característica de la idiosincrasia de nuestro pueblo y fecha propicia para que la familia anfitriona, en esmerada  atención,  ofrezca a los comensales entre familiares,  invitados y “agregados” la rica carapulcra lurinense, plato exquisito y típico de nuestro pueblo, hecha con papa seca,  maní, cabeza de chancho, acompañada de la sopa seca con gallina, que es el  deleite de propios y extraños, como si fuera poco, regada con un buen vino y luego con la espumante cerveza.  Allí es frecuente escuchar cuando alguien recibe la botella o la jarra a punto de terminar…

 - ¡Fíjate pues, me la estás dando en seca: ¡Pásame otra Jarra!...Y la respuesta, mirando al anfitrión y al bien surtido bar, no se hace esperar: Como dijo “Don Maga”:.... ¡En seca, en seca,  cuando se va a secar, habiendo tanta agua en el mar!…
ASÍ ES COMO LLEGAN LOS HOMBRES
Otra de las actividades laborales importantes en nuestro legendario y tradicional distrito de Lurín, junto con la pesca era indudablemente la agricultura. En el valle existían diversas y extensas haciendas, grandes chacras, potreros y campos de cultivo, en los cuales la gente laboraba en jornadas diarias para el cultivo de una variedad de productos, entre los más importantes, el algodón, la cebolla, papa, camote, zapallo, yuca y otras especies que después de la cosecha iban destinadas a los grandes mercados de la capital para el consumo de la población…
Don Matías, era uno de los tantos agricultores. De mediana estatura y recia estampa a pesar de su contextura delgada. tenía una lesión en la espalda (Espina dorsal) que hacía que caminara siempre algo inclinado, lo cual no era óbice para poseer prestancia,en su expresión y dueño de una vasta cultura aprendida en la Escuela de la vida y en el diario trajinar, desde muy pequeño siempre acostumbraba a escuchar con atención las conversaciones de los ancianos llenos de sabiduría que con mucha acuciosidad asimiló con el paso de los años y que lo habían vuelto una persona a la par de alegre e impredecible, reflexivo y con respuestas  precisas y profundas repletas de sabiduría, la chispa contagiante y una amplia sonrisa siempre a flor de labios que lo acompañaban, constituían el sello inconfundible de su buen ánimo, una persona positiva a pesar de las adversidades ….. Era muy común verlo retornar a casa después de las seis de la tarde, silbando o tarareando los boleros antiguos luego de cumplir la faena diaria, varón reconocido y respetado sumamente hábil con el pico y la lampa, capazote con el arado y también con la labia para la joda y el cachondeo….
Alguna vez uno de sus escuchas  durante una conversación casual uno de sus opyentes le había preguntado: Don Matías dígame para usted que es un amigo?... el luego de pasarse la mano por la barba algo crecida y sacándose el sombrero para rascarse la cabeza con el dedo anular como siempre lo hacía, (dándose un tiempo antes de emitir su respuesta) le dijo:….- “Mira sobrino, Amigo lo que se dice Amigo,  es uno mismo, con diferente pellejo”….
Los días sábado la jornada era hasta el mediodía, luego pasaban a recibir su jornal y tenían libre por la tarde y el domingo…algunos aprovechaban para reunirse en alguna cantina o “chingana” para conversar un poco y distenderse luego de la ardua tarea de la semana….  Un sábado de tantos contó con la presencia de don Matías, quien había estado de cumpleaños en la semana y no había podido celebrar por haber “caído” en día particular, así que aprovechó con sus amigos más cercanos y algunos compañeros de labor para tomarse unas copitas y conmemorar la fecha tan importante: “Además  es un solo día en el año, y al Santo hay que celebrarlo, no se puede dejar pasar por alto…si no, Dios castiga”……
Empezó la tertulia contando anécdotas y una que otra ocurrencia dentro de las actividades agrícolas de la semana, de tal manera que casi sin darse cuenta fue pasando el tiempo y se hizo de noche…. Uno a uno los parroquianos se fueron retirando, sin embargo don Matías seguía adelante para el no había tope y estaba entusiasmado, además era su santo…. Y fueron llegando uno que otro conocido y se acercaban a su mesa para saludarlo y tomarse unos tragos y luego se retiraban del lugar, el seguía adelante demostrando tener clase y aguante para beber….. Hasta que la señora que atendía le dijo: Don Matías ya está bueno, además voy a cerrar…. Me parece que usted ha tomado bastante, creo que es prudente que se vaya a descansar…. A lo cual contestó: Doña le agradezco que se preocupe por mí, pero yo sé hasta cuando puedo tomar, soy de Lurín y he sido amamantado con leche de los pechos de mi madre y no  con leche de tarro ni de vaca raquítica, así que sírvame las dos últimas que son las del estribo….
-Don Matías creo que ya esta bueno por hoy, si desea mañana lo sigo atendiendo, ahora  tengo que irme a descansar y usted también.
- Solo los muertos descansan en la tumba fría! a mi me queda plata y fuerza para tomar un par todavía!…ya ve y me salió en verso, usted sabe yo no tomo así nomás, pero… ¡ cuando se toma, se toma! Se toma bien y no a media caña…..(En el argot o jerga del pueblo media caña significa dejar algo inconcluso, a medio terminar y para él era sinónimo de incompetencia y mediocridad) - -¡Además mañana mi patrona ni me va hablar!…..
Después de una breve charla interrumpida a cada momento por la dueña del local, no tuvo más remedio que emprender la retirada, siempre respetuoso y aun en la borrachera guardando la educación que le habían dado en el hogar, se despidió muy cortésmente, aunque su caballerosidad y buenos modales no guardaban precisa armonía con sus torpes movimientos, así que cuando se puso de pie  casi  derriba las botellas vacías y una caja que estaba al costado de la mesa.
-Disculpe señora pero no sé por qué le han echado tanto aceite o manteca de chancho al piso que se me mueve todito….- ¡Ya! ¡Ya! me retiro… muchas gracias, hasta mañana.
Salió tambaleante y la señora cerró el local. Luego ya en la calle, levantando la palma de la mano a la altura de los ojos empezó a divisar el panorama de norte a sur para orientarse en qué lugar quedaba su casa….. Recién entonces reparó que había ingerido cantidades navegables de trago y los amigos ya no estaban con él.
-Bueno por esta vereda he venido y por aquí tengo que llegar, empezó la odisea y se fue silbando y tarareando “Voy por la vereda tropical, la noche plena de quietud con fresco aroma de humedad”…..
Después de tanto esfuerzo y con algunas caídas y otras tantas levantadas, divisó la pequeña alameda previa a su hogar, pero ni los perros salían para auxiliarlo…
Tan solo faltaban unos escasos cincuenta metros para llegar,  si que se hacían interminables, sentía que las fuerzas ya no le daban pero tenía que seguir,  no se podía abandonar.
Luego de más de dos horas de luchar contra la adversidad, la escasa energía que le quedaba, del suelo que no dejaba de moverse y cuando estaba llegando literalmente a la puerta de su casa se vuelve a caer y esta vez si no se pudo poner en pie…. Un joven, vecino que por suerte llegaba a casa en esas horas de la noche se dio cuenta de lo sucedido y fue presuroso para auxiliarlo…
-¡Don Matías, mire como está!…. ¡Creo que esta vez si se pasó de tragos!….
Sin embargo ante la sorpresa del vecino el veterano varón, que había forjado el carácter en mil avatares de la vida no dejó que lo ayudara y sacando fuerzas de flaquezas con el orgullo que le quedaba  intacto, contestó:
- ¡Déjame  carajo…! ¡Que así es como llegan los hombres y no a media caña!….
Esta divertida ocurrencia y anécdota no pudo pasar desapercibida y quedó grabada en la memoria colectiva del pueblo, en las llenadas de techo, en las arduas jornadas laborales de agricultura, en los días de pesca con ardiente sol y la mar brava, en fin cuando el esfuerzo era grande y la voluntad y el carácter se ponían a prueba, la adversidad arreciaba y alguien pretendía aflojar en plena brega, por allí se deslizaba esta frase…¡¡Dale no más, como dijo don Matías, ¡¡¡Así es como llegan los hombres y no a media caña!!....

 Frase plena de frescura, esa frescura de nuestro hermoso valle, como húmeda brisa que salpica y alegra el corazón de sus hijos… cuando el río culmina su largo y extenuante recorrido, sin interrupciones, para finalmente unirse con el mar, en hermoso rito natural, simulando aquel hijo que corre al regazo de su padre pretendiéndolo  abrazar… y unidos continuar, hasta el final.